Estoy trabajando en un tema que me parece apasionante y que tiene sus luces y sus sombras, como todo tema, que es la inteligencia artificial. Cada vez más personas están fascinadas con el Chat GPT y con todas las posibilidades que se abren al interactuar. Sin embargo, algunos especialistas están empezando a poner alertas sobre el futuro de los humanos con la inteligencia artificial. Y me parece hasta intenso para mí decirlo: El futuro de los humanos, el futuro de nuestra especie.
¿Qué va a pasar con nosotros? Sin ser apocalíptica, ya se está hablando de que en cinco años los puestos como los conocemos ahora van a desaparecer en un alto porcentaje. Que muchas personas queden fuera del mercado laboral, reemplazadas por la automatización. Que trabajos rutinarios sean automatizados e incluso trabajos con mayor sofisticación, también puedan ser automatizados, si no en forma total, parcialmente.
El desafío que yo creo que va a ocurrir en los próximos años es que vamos a necesitar aprender a combinar el trabajo humano con los robots. Pienso en parejas laborales entre humanos y robots, aunque todavía me parezca extraño pensarlo. La velocidad de los cambios posibilita que estemos escribiendo este artículo y hablando de esto. Ya existen empresas con un alto porcentaje de automatización en sus plantas de producción. Por lo cual, pensar en trabajos de análisis inteligente, intelectual, con robots, no es extraño ni tampoco lejano. Yo recuerdo una cena que tuve con profesionales de distintas disciplinas, resistiéndose a pensar estas cuestiones y negando toda posibilidad de reemplazar los humanos por robots. Se convencián a ellos mismos proponiendo que los robots iban a seguir siendo máquinas, que es imposible que sientan emociones humanas y que, si esto ocurría, faltaba mucho tiempo para que pudieran vivirlo. Yo creo que los robots ya sienten emociones. Que se los está diseñando cada vez más humanizados.
¿Entonces, qué vamos a hacer con esto? ¿Mirar para otro lado? Los que trabajamos en servicios, en educación, en análisis de la conducta y en consultoría, los que asesoramos personas y empresas, ¿en qué lugar vamos a estar? ¿Vamos a hacer como que no pasa nada? ¿O vamos a empezar a informarnos y formarnos y empezar a pensar que esto es una realidad cercana? ¿Cómo nos pensamos en los tres, cuatro, cinco años próximos? ¿Cuánto hoy estás interactuando con el chat GPT? ¿Cuánto hoy ya es parte de tu realidad, no sólo como una exploración, sino como parte de un acompañamiento de toma de decisiones?